domingo, 10 de octubre de 2010

Lienzo de la Pureza

Tradicionalmente, las prendas de vestir sobre todo en los países islámicos, tienden a representar más de lo que en occidente podríamos interpretar como represión, sometimiento o falta de identidad, sobre todo entre  las mujeres. Las bases de las sociedades musulmanas buscan fomentar lo decente, alejando a cada creyente del vicio y de la inmoralidad. Dicha decencia se traduce en modestia, y en cuanto a la forma de vestir, el Corán conlleva a una serie de recomendaciones –mientras que no las impone- sobre  el cómo vestir de sus creyentes: tanto hombre como mujeres deben vestir con discreción, los primeros del ombligo a las rodillas, las segundas deben cubrirse todas. Estas características son, más bien, parte de un fundamentalismo (en ocasiones tan radical, como en algunos países: Irak y Paquistán) que va adquiriendo una aceptación dogmática, principalmente, el uso del velo (hiyab) como prenda esencial de las mujeres.

En la época antigua, las mujeres nobles de Babilonia y Persia cubrían sus cabezas con un lienzo o velo, un accesorio que las alzaba dentro de la sociedad. De esta manera, Mahoma quiso que sus esposas y seguidoras se cubrieran de igual forma, esto para evitar que las confundieran con otras mujeres de diferente creencia o de la calle, por lo que el hiyab se convirtió en un símbolo de identidad. Si tomamos en cuenta que, las mujeres fueron un eslabón primordial para la difusión de las enseñanzas del profeta entre los pueblos paganos, por ejemplo: su primera esposa, Jadiya, siendo también la primera persona en creer en él, después de la revelación.

Actualmente, el velo de las mujeres musulmanas es un símbolo de identidad a nivel mundial, que las distingue de mujeres occidentales, Europa primordialmente. Éste, se ha “[…] impuesto silenciosamente: las tradicionalistas por mantener las costumbres, las fundamentalistas por su ideología y su oposición a Occidente, y para las más, como salvaguarda ante los hombres o símbolo de feminidad musulmana, o como única vía para acceder al entorno social”. Dicho símbolo, ha fomentado a la vez el modelo de ideal de feminidad musulmana: la obediencia y modestia, mediante el cual una mujer no se enorgullece de su cuerpo, ni cuestiona las leyes ni las normas, oculta su pelo y, además, su aspiración es dedicarse a su esposo.

El origen del hiyab y su uso, tiene una connotación directa del significado de la misma palabra, la cual procede del verbo hayaba, que significa “ocultar”: algo que no debe dejar a la vista; pero esto tiene, más bien, una vinculación con la sexualidad, en términos y usos de ésta en la sociedad musulmana. Cuando una adolescente tiene su primera regla llamada mahyuba (velada), se deba ocultar este hecho, por ello se le cubre. Según cuenta la creencia hebrea, la llegada del Pecado, acompañado por el Diablo en forma de una hermosa mujer cuyo fin era provocar el deseo masculino con su sensual, larga y brillante melena. La solución fue: cubrir el cabello y alejar a éste perturbador –la mujer- de la comunidad, por que los hombres no son capaces de controlar su apetito sexual  (no hay que olvidar la influencia que tuvo la religión tanto judía como cristiana en el Islam).

Por lo tanto, este relato hace constatar esas bases tradicionales del recato de las mujeres musulmanas, que no siempre fue así, ya que la condición de éstas en el Islam cambio constantemente y de diferentes maneras, durante la historia y en determinados sitios. Si bien, en la era preislámica, la creencia estaba conformada por muchas divinidades femeninas, como Allat (dama de la guerra), pero la reorganización de estas tribus,  ubicadas en lo que hoy conocemos como Medio Oriente o Próximo Oriente, no sólo significo la sumisión del ser humano a un único Dios varón, Alá, sino que supuso el sometimiento del sexo femenino bajo el masculino; reflejado como hemos apuntado anteriormente con la modestia al vestir y las medidas extremas, por un lado, y las no tanto, del uso del velo.

Siendo que el tema sobre las mujeres del Islam y su papel dentro de la sociedad musulmana suelen ser muy interesantes, en posteriores entradas continuare hablando de ellas y sobre todo de sus vestimentas.

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