Primeras Palabras

Es curioso el hecho que cuando una persona afirma que nadie la escucha y comprende, a su vez se le pida que comience a escribir sobre cualquier cosa,  pero al momento de enfrentarse con un hoja en blanco su mente se quede de la misma manera, o peor aún, que tenga tanto que decir que no encuentre las palabras o frases adecuadas que expresen su sentir, y mejor dicho, las primeras palabras de su pequeño escrito.

Y ese es el meollo del asunto, siempre al comenzar a escribir sobre un tema que sea incluso una carta a un amigo (a), esas frases iniciales es todo, así es, todo. Por lo que al momento de plasmarlas, lo demás como se dice coloquialmente “es pan comido”.

Uno puede comenzar de tan diversas formas, y los estilos son tan variados que al final puede ser un producto completamente distinto, incluso más genial de lo que uno pensaba cuando se dio ese primer comienzo.

A veces puede que sea sólo una lluvia de ideas o que tengamos el final. No por ello, es realmente simpático el caso de J.K. Rowling escribiera una de las más grandes obras para adolescentes de nuestros tiempos, iniciando precisamente con el final, un dato curioso para la cultura general, ya que tuvo que esconder ese clímax tan interesante, mientras terminaba de escribir los demás libros. E incluso que ella no se imaginaba el éxito que tendrían esas frases iniciales escritas en trozos de servilleta en un recorrido en tren.

No obstante, para un estudiante universitario de hoy en día, el escribir y plasmar sus ideas en papel, es seguramente un gran reto, y su meta, al darse a entender, sobre todo a él mismo. Un Gran Reto, afirmaría, por que se tiene que lidiar con el trabajo, escuela, el tráfico de día a día, las actividades sociales, etc.….etc. Y más si agregamos que en lo particular en la cultura mexicana, si no se tiene el hábito de leer o terminar de leer por lo menos un libro promedio al año, el escribir es inimaginable.

Entonces, puedo decir que, sí, si lo es. El plasmar ideas propias sobre una hoja en blanco es un gran reto. Pero el único chiste de todo es iniciar, contando un chiste, transcribir una canción o contar sólo lo que te paso en el día. El verdadero resto es: esas Primeras Palabras.